Blog

Mastitis

Mastitis en un término que seguro has escuchado alguna vez pero, ¿sabes cómo prevenirla? A continuación explicamos cómo hacerlo.

El término mastitis hace referencia a una inflamación de la glándula mamaria que puede ser localizada o generalizada a toda la mama, y  no siempre se acompaña de infección.

Es una de las principales causas de abandono de la lactancia, por tanto es importante que sepas qué es y cómo reconocerla para poder pedir ayuda. También es fundamental conocer que la presencia de una mastitis no contraindica la lactancia, y siempre que la madre lactante desee continuar con lactancia materna, debemos apoyarla y guiarla en este proceso.

La presencia de grietas, vaciamiento insuficiente de la mama, obstrucción de conductos, uso de sujetador apretado, tiempo estricto entre tomas y no a demanda, son factores de riesgo para desarrollar mastitis.

Tipos de mastitis según el tiempo de evolución:

 

Mastitis aguda.

La evolución es rápida y el síntoma principal es dolor intenso localizado en un área específica de la mama, enrojecimiento y aumento de temperatura en la zona afectada.

La causa normalmente es una retención de leche no diagnosticada que si no se corrige rápidamente, se puede infectar y evolucionar a una mastitis infecciosa asociando fiebre, escalofríos y malestar general.

Es importante aclarar que algunas mastitis agudas en su etapa más inicial se pueden solucionar con cambios posturales, aumentando la frecuencia de tomas o mejorando el vaciamiento de la mama.  Si la infección está instaurada también requerirá valoración médica y probablemente tratamiento antibiótico.

En el 3% de los casos se puede producir una colección de pus en la mama (absceso mamario) que requerirá además drenaje en quirófano.

 

Mastitis subaguda.

Tiene un inicio más lento y el dolor es menos intenso que en las mastitis agudas, siendo más generalizado y asociando sensación de escozor o calambres; no suele estar asociado a fiebre.

 

Implicaciones de la mastitis para la lactancia.

  • Es una experiencia dolorosa para la madre, es importante pedir ayuda y recibir el apoyo adecuado.
  • En ningún caso está indicado suspender la lactancia, de hecho se recomienda aumentar el vaciado del pecho para evitar acúmulos de leche que predispongan a la sobreinfección.
  • La leche del pecho afectado por mastitis no es perjudicial para el bebé.
  • El sabor de la leche puede cambiar ligeramente por lo que podemos observar que el bebé rechaza transitoriamente la toma de ese pecho.
  • Tras la resolución de la mastitis puede disminuir transitoriamente la producción de leche.

 

¿Cómo puedo prevenir una mastitis?

  • Lactancia a demanda ya que la producción de leche se establece en función de las necesidades del bebé.
  • Vaciamiento frecuente de ambas mamas.
  • Evita sujetador apretado y camisetas muy ajustadas.
  • Si presentas dolor en las tomas o grietas solicita ayuda para revisar la técnica de lactancia y así evitar la sobreinfección y desarrollo de una mastitis.
  • Si notas dolor en el pecho puedes ayudarte con un masaje circular antes de cada toma y probar otras posturas para dar el pecho. Si el dolor persiste es mejor que contactes con un especialista en lactancia: matrona del centro de salud, Ginecólogo de referencia, servicio de Urgencias o bien puedes buscar tu consultora IBCLC más cercana.

 

¡Hola! Utilizamos cookies en esta web.

Usamos cookies en nuestro sitio web. Algunas de ellas son esenciales para el funcionamiento del sitio, mientras que otras nos ayudan a mejorar el sitio web y también la experiencia del usuario (cookies de rastreo). Puedes decidir por ti mismo si quieres permitir el uso de las cookies. Ten en cuenta que si las rechazas, puede que no puedas usar todas las funcionalidades del sitio web.